Proteger a los trabajadores en los Estados Unidos es crucial para su sustento, ya que garantiza que reciban un salario justo por su trabajo. Esto también promueve la equidad, asegurando que todos los empleados, independientemente de su origen, tengan las mismas oportunidades y derechos laborales. Cuando los trabajadores están protegidos, tienen la seguridad financiera necesaria para mantener a sus familias y mejorar su calidad de vida. Además, proteger a los trabajadores fomenta un ambiente laboral saludable y justo, lo que aumenta la productividad y satisfacción en el trabajo. A largo plazo, estas protecciones son esenciales para el crecimiento económico y la estabilidad social del país. En última instancia, al cuidar de los trabajadores hoy, estamos invirtiendo en un futuro más justo y próspero para todos.

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